Recuerdo una conversación con Carmen Bravo, la viuda de Mompou. Fue en Barcelona. Carmen asistió a un concierto mío y, antes de que comenzase, estuvimos hablando junto a Josep Soler. Me preguntó si estaba tocando alguna obra de su marido. Efectivamente, estaba trabajando en esos meses la Música callada. Después, se interesó por las obras de Mompou que se encontraban en los programas del Conservatorio de Valladolid. Sentía la necesidad de custodiar y difundir el legado de Mompou.
Carmen ha muerto hace unos días.
1 comentario:
Le habría gustado saber que esta tarde Jean-Yves Thibaudet interpretó una pieza de su marido como propina en el auditorio de Valladolid.
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