Recuerdo a mi padre llevándome a mi primera clase de música. Yo era un niño, claro, pero tengo en la memoria algunas palabras, algunos nombres que él pronunció: "le encanta y además toda la familia de mi mujer está llena de músicos", algo así dijo con el timbre de su voz que ahora escucho exactísimo. Ese día comenzó todo. Y esa ilusión no ha hecho más que aumentar con el paso del tiempo, ese amor por la música adquiere una intensidad mayor a cada paso, en cada nuevo descubrimiento, en cada nueva partitura. Hoy me han concedido el Premio Nacional de Música, y creo que sólo puedo merecerlo por esa pasión irrefrenable. Hace poco le dije a Luis García Vegas que me parecía estar empezando a descubrir algunas cosas del piano. Algunos detalles, pequeños, nada más. Creo que me encuentro en el principio de un camino muy largo y maravilloso. Pero estoy sólo en el comienzo. Por eso este Premio me emociona y me abruma. Porque algunos podrán pensar que sé algo importante sobre música. Y cuando esta tarde me entrevistaban una y otra vez, no podía dejar de sentir una extrañeza próxima al desasosiego. Cómo explicarles, sin aparentar el horror de la falsa modestia, que no soy un "gran pianista", ni un "experto en música contemporánea", ni todas esas frases que decían sobre mí. Pero lo cierto es eso. Soy únicamente una persona enamorada de la música, de su auténtica vocación.
Hace casi un año, estrené 22 obras en el Auditorio Nacional de Madrid. Quise rememorar a Ramón Barce, dedicarle un concierto en el primer año de su muerte, ya que nada más podía hacer por mi inolvidable amigo, tan generoso y tan sabio. Todos los compositores participaron desinteresadamente, movidos por el afecto y la amistad. Hoy Ramón me devuelve el regalo, porque este Premio tiene mucho que ver con ese día.
Siempre he creído que nada hay más estimulante para un intérprete que estudiar las obras con sus creadores y difundirlas. Que esto merezca un premio, es un gozo inmenso. Y, sobre todo, ver cómo muchas personas se han alegrado por ello.
Muchísimas gracias.
Diego, cuando he leído los motivos de la concesión de tu premio he sentido una culebrilla por la espalda. Yo estuve en aquel concierto homenaje a Barce en el Auditorio. Fue la primera vez que te oí tocar y me pareció tan hermoso todo el acto...
ResponderEliminarDice mucho de ti el recordar a tu padre y tu primera clase de música en un día como hoy.
Un abrazo
Mi más sincera enhorabuena.
ResponderEliminar¡ENHORABUENA querido Diego! Un premio MUY merecido, estoy segura. Emotivo tu recuerdo infantil de tu padre llevándote a tu primera clase y siempre acordándote de tu maestro Ramón Barce. Dice mucho de ti, querido amigo. ¡A ver cuando vienes a Barcelona! Muchísimas felicidades de nuevo. Besotes y abrazotes, M.
ResponderEliminarAinsss Diego !los padres siempre en nuestro corazón y en nuestro recuerdo!!
ResponderEliminarMerecídisimo premio, a la persona, al músico, al intérprete...!!!ENHORABUEEENA!!
un abrazo enorme
Diego, me alegro mucho. ¡Enhorabuena! Espero que si vienes a Madrid, esté por allí para ir a verte y saludarte y felicitarte personalmente. Un abrazo, y
ResponderEliminarSalud y República
Esta mañana te he escuchado en la radio y pensé en ponerte un mensaje, ahora he leído tu entrada.
ResponderEliminarTe felicito, a tí y a todos, los que con esfuerzo y sacrificio personal de horas de práctica y estudio enseñais que el único camino posible para que la sociedad y nuestro pueblo avance es el trabajo bien hecho y el esfuerzo.
Al ser castellano-leonés las gracias son doble porque a esta tierra le hace falta eso.
Felicidades y gracias.
saludos,
Querido Diego,
ResponderEliminarmerecidísimo, merecidísimo, merecidísimo!
Cómo me emocionaron tus palabras, tal como me emocionaron a leer tu libro. Tenés la capacidad de transmitir tanta sensibilidad con la música y con la escritura. Sos un artista de verdad.
Enhorabuena.
Diego, un abrazo muy fuerte y mi enhorabuena.
ResponderEliminarQuerido Diego:
ResponderEliminarMuchas felicidades por un merecido premio que reconoce, de forma acertada, tu constante vocación, esfuerzo, pasión y dedicación hacia una parte de ti mismo, que es la música. Disfruta este premio con tu familia. Un abrazo. Miguel
Enhorabuena por el Premio Nacional de Música!!
ResponderEliminarun abrazo desde León!
enhorabuena Diegooooooooooooooooooooooo
ResponderEliminarMerecido, merecido y merecido
Querido Diego: esta entrada te honra. Como músico, pero sobre todo como persona. Un abrazo y enhorabuena.
ResponderEliminarEnhorabuena!
ResponderEliminarMuchas felicidades.
ResponderEliminarCésar Coca
Blog Divergencias
Caro Diego, lhe venho dar os parabéns( enhorabuena) pelo prémio, merecido.
ResponderEliminarVenho através do La Acequia do meu querido amigo Pedro Ojeda .
Abrazo.
Muy interesante su blog.Belisimo.Estoy lhe chamando a visitar mi blog, e si posible seguirmos juntos por eles.Estoy esprando por vc, l´[a
ResponderEliminarAbrazos
Son hermosas tus palabras, Diego, pero es mucho más hermosa tu actitud humanista siempre.
ResponderEliminarUn abrazo fuerte, fuerte.
¡Enhorabuena!
ResponderEliminarSaludos.
Hay ocasiones en los que los premios son merecidos, Maese Diego.
ResponderEliminarEsta es claramente una de esas. Enhorabuena. Hoy brindaré a tu salud.
Me repito y no me canso de hacerlo: muchas felicidades Maestro
ResponderEliminarLos premios merecidos son los que dejam un mejor sabor de boca. ¡Enhorabuena!
ResponderEliminarComo siempre nos dejas sin palabras, con tu palabra y con tu música, aunque lo importante es tener oídos para escucharte. Muchas, muchísimas felicidades. Te besaré cuando te vea, que tengo ganas.
ResponderEliminarMe he encontrado a tu hijo Pablo (por cierto, que orgulloso estarará también el abuelo Pablo), casualmente en la calle de las Armas. Le he preguntado por tí, y me dice que te han concedido un premio consistente en una "gominola gigante".Andando el tiempo sabrá lo que tiene que saber de su padre... Y ojalá llegué a quererte como tu al tuyo.
ResponderEliminarCualquier día te escribo otro "Continental" como el de antaño, para recordarte cuanto te quiero y admiro.
J.Antonio Pizarro.
Perdoname la intromisión, pero los amigos de mi profesor-amigo, Pedro Ojeda son mis amigos, con mayor razón si son músicos.
ResponderEliminar¡Felicidades de corazón!
Saludos: Paco
¡Enhorabuena! ¡Enhorabuena! ¡Enhorabuena! Muchos besos Diego,
ResponderEliminarRober
Qué alegría entrar en el blog y conocer esta estupenda noticia. ENHORABUENA.
ResponderEliminar¡Muchas felicidades por ese Premio Nacional, Sr. Fernández Magdaleno!
ResponderEliminarMe gusta que recuerde en estos momentos de felicidad a su familia, sus orígenes, ese concierto emotivo y a las personas que le aprecian y se alegran al conocer la noticia.
Le he conocido a través de varios amigos blogueros, hoy llego aquí después de leer (y comentar) las entradas sobre la concesión de su premio en los blogs de Freia, Adanero y Pedro Ojeda, respectivamente. Desde hoy me sumo a los seguidores de sus "palabras del agua".
Saludos.
Enhorabuena por el premio, Diego. Fdo: Manuel GV
ResponderEliminarMuchísimas gracias, de corazón.
ResponderEliminarAbrazos,
Diego
Enhorabuena por esa pasión por la música constantemente renovada. Me alegro mucho de que hayan reconocido tu trabajo con el Premio Nacional. M.I. Cartón (Tordehumos).
ResponderEliminarComo seguidor de tu bitácora desde hace tiempo, me alegra mucho este reconocimiento. Enhorabuena. Disculpa el retraso, pero tu buena noticia coincidió con el nacimiento de mi hija y hasta ahora no he tenido tiempo.
ResponderEliminarfelicidades con casi dos años de retraso, (voy hacia atras en los post) bien merecido! salud!
ResponderEliminaresa primera clase en la trastienda, hace cuantos años ya?