En la imagen estoy con Francisco García Álvarez, Carme Fernández-Vidal, José Santos y Albert Sardà poco antes de mi concierto de ayer. Hice un programa largo y difícil, con bastantes obras nuevas. Algunas, además, recibidas hace poco.
Qué complicado es tocar un programa de estas características con tan poco tiempo de preparación y con tanta dificultad en las obras. Solamente al alcance de un pianista como Diego Fernández Magdaleno.
No es de extrañar el agotamiento pero directamente proporcional a la alegría y el placer del trabajo bien heecho, compartido además con el público, los amigos y la familia. Un abrazo Maestro.
Qué complicado es tocar un programa de estas características con tan poco tiempo de preparación y con tanta dificultad en las obras. Solamente al alcance de un pianista como Diego Fernández Magdaleno.
ResponderEliminarPíriz
No es de extrañar el agotamiento pero directamente proporcional a la alegría y el placer del trabajo bien heecho, compartido además con el público, los amigos y la familia.
ResponderEliminarUn abrazo Maestro.
Una vez más, y no será la última, enhorabuena. Después del esfuerzo, disfruta con los tuyos del trabajo bien hecho. Una abrazo. Miguel
ResponderEliminarAbrazos y besos por ahí...
ResponderEliminarAhora a reponer fuerzas