Este 2018 en el que se celebra el centenario del Conservatorio de Valladolid, acabamos de perder a María Jesús Sanz, profesora de canto, compañera y amiga.
María Jesús era una mujer vital, directa y alegre, con una fortaleza que ha sido un verdadero ejemplo para todos.
Cierro los ojos y escucho su voz. María Jesús canta y José Julio Fernández está con ella, en el piano, como tantas veces a lo largo del tiempo.
El lunes, en el conservatorio, seguirá el bullicio de la entrada y el trasiego de estudiantes con sus instrumentos. Y mientras eso sucede, muchos sentiremos la pena de no ver la sonrisa de María Jesús, aunque también sepamos que la encontraremos siempre en los territorios más queridos de nuestra memoria.
Fui su alumna. Muchas gracias por sus palabras.
ResponderEliminarMuchas gracias a ti, Vega.
ResponderEliminarMi querida hermana. Siempre fuiste preciosa. Qué privilegio para mí nuestros lazos de filiación. Me brotan las lágrimas en este preciso instante en el que halo de ti a algunos de los que te conocieron. No llores de pena sino de amor me dijiste en tu lecho de muerte. Mis lágrimas riegan las semillas de bondad que has dejado en mi. Bendita sea por siempre tu memoria. Gracias Diego por esta mencion a María Jesús.
ResponderEliminarSiempre la recordaremos con mucho cariño.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo,
Diego
Gracias.
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